Gotas
que vienen y van,
tintinean y se multiplican,
entre acordes y olvidos.
Por eso,
hay sin recuerdos,
oídos sordos,
miradas ajenas,
nadie quiere seguir
bajo la lluvia del descontento
y sólo hay palabras,
dulces palabras para tal alivio.
© RoseMarie M Camus Poetry & Photography
Y siempre existe la palabra que nos salva del desconcierto.
ResponderEliminarAbrazos mi querida compatriota.
Gracias querida Taty, como siempre, es un agrado inmenso leer tu comentario.
EliminarBesitos y bendiciones.